martes, 15 de diciembre de 2009
Verdecia; Discretos números y entrega total
Por: Álvaro Álvarez Díaz
Foto: Juan Carlos Roque Alonso
“Yo soy natural de un lugar que a lo mejor muchos jamás han oído mencionar, La Canoa, hoy barrio Santa Elena, en la zona de Laguna Blanca a unos 25 kilómetros del pueblo de Contramaestre, y a los nueve años vine a residir en el Reparto: “Patricio Lumumba”, en calle 11, número: 115, entre 18 y 20, ahí está la casa de todos los que deseen visitarla”.
Dialogar con este guajiro es una suerte para cualquiera, la sinceridad le brota por los poros, es Luis Mariano Verdecia Fonseca una de las glorias deportivas de Contramaestre, estuvo en ocho series nacionales, fue lanzador derecho y siempre ocupó el puesto de relevista en varios equipos del Oriente del país.
Te propongo “Vicho” (como también se le conoce por acá), comenzar por el principio…
“Mi madre me trajo al mundo el diez de junio de 1952, ¡¡¡Ñooo!!! ¿Ya cumplí 57 años?, como pasa el tiempo señores. Entre cañaverales, matas de mango, guayabos, plantaciones de boniatos y yuca, en fin….hasta los nueve años que vine a vivir aquí, cerca del estadio, por suerte. Aunque nadie de la familia se interesó por el béisbol, uno de los primeros lugares que visité tan pronto puse los pies en este pueblo fue el estadio”.
¿Ya existía el área para la práctica de ese deporte?
“Realmente se daban los primeros pasos, ya se había fundado el Instituto Nacional de Educación Física y Recreación (INDER), te hablo del año 1961, y recuerdo que venía diariamente un instructor del poblado de Jiguaní, reunía unos cuantos muchachos y a jugar pelota, y yo cada vez que salía de la escuelita “Leonor Pérez” que está relativamente cerca del estadio, iba para allá, hasta que un día se apareció el conocido “Niño” López a organizar la práctica del deporte y logré insertarme seriamente en el área”.
¿Habías definido una posición?
“Si, siempre me gustó lanzar, ser pitcher, además no era muy bueno al bate, pero me llamó la atención esa eterna rivalidad pitcher-bateador, y quise enfrentar el reto, por cierto me salió bien, enseguida me captaron para la Escuela de Iniciación Deportiva Escolar (EIDE) y entonces sí le puse interés al deporte. En la escuela tuve la suerte de recibir las instrucciones de Edildo Hernández, prestigioso entrenador santiaguero, con él fui a los eventos nacionales escolares y juveniles, hasta que en el año 1968 siendo todavía juvenil, otro reconocido preparador José “Pepín” Carrillo me invitó a los entrenamientos del equipo Mineros para la serie nacional”.
¿Cambió la vida de Luis Mariano Verdecia?
“Ohhh, eso para mí significó uno de los momentos más grandes de mi vida, pero a la misma vez todos los profesores que habían trabajado conmigo me decían: esta es la oportunidad, no la puedes perder, afíncate, y eso fue lo que hice, entregarme con todo, hasta que en el propio año 1968 debuto en la VII serie nacional, junto con un gran amigo del barrio William “Piri” Mendoza, también estaban en los Mineros Elpidio Mancebo, Ramón Hechavarría, Fermín Laffita (que por cierto el otro día leí en una periódico una propuesta de los mejores 50 peloteros de la Revolución y no está Laffita, ¿cómo es posible?) El Chivo” García, Orlando Figueredo, Braudilio Vinent, Agustín Arias, entre otros, así estuve ocho campeonatos cubanos, por ahí están los números”.
Luis Mariano, militó también en otros equipos del Oriente como Serranos, Cafetaleros, Orientales hasta el primer año de Santiago de Cuba con Higinio Vélez como mentor. En su incursión por las series nacionales ocurrieron hechos que marcaron el historial como pelotero de Luis Mariano Verdecia…
¿Alguna anécdota en particular?
“No se me olvida nunca, un juego frente a Industriales en el “Latinoamericano”, venía a batear Urbano González con dos corredores en base, le tiré dos curvas en zona de strike y no le hizo swing, rápido pensé si lo poncho será una hazaña, porque éste hombre no se poncha fácil, le tiré dos rectas por fuera y con tan buena suerte que le repetí después la curva y se la cantó el principal, disfruté ese ponche como ningún otro, imagínese que en trece series nacionales Urbano se ponchó sólo 67 veces”.
“Tuve la suerte de lanzar tres juegos en este pueblo, uno en Maffo que perdí con Camagüey (1-2), después le gané a Villa Clara 3-1 en el estadio de Lumumba y otro lanzando por Orientales ante Mineros 4-2, ahí le dije al manager: terminé”.
¿Nuevas responsabilidades?
“Desde 1972 pasé a la plantilla del INDER y cuando decidí el retiro del deporte activo, me incorporé a trabajar con niños en el mismo estadio donde me inicié como pelotero y aquí estoy, fui a Venezuela en el 2004 por espacio de 18 meses, en el estado de Zulia tuve la oportunidad de enseñar a un grupo de infantes algunos detalles del béisbol”.
“Sin embargo recuerdo como uno de los inolvidables momentos de instructor, el día que vino el zurdo Rubén Rodríguez Medrano, con cinco años de edad, interesado en llegar a ser pitcher y la historia se conoce, estuvo en 16 series nacionales ganó 98 juegos y perdió 61 con los equipos de Santiago de Cuba, después llegó al área el también zurdo Yaicel Pérez y ya estuvo en el Nacional Juvenil de éste año, integrando el elenco indómito que logró el título”
“¿Quiere usted una satisfacción mayor para un guajiro, que sólo conocía de monte, azadón, machete?…..no tuve grandes números en la pelota cubana pero, puede estar convencido que me entregué absolutamente a un deporte que constituye mi pasión”.
Luis Mariano Verdecia Fonseca en Números:
Ocho series nacionales, lanzó en 148 juegos, inició 45, completó 12, relevó en 103, ganó 13 y perdió 36, salvó 5. Además lanzó en 496 entradas, permitió 140 carreras limpias, para una efectividad de 2.54 y los rivales le batearon para 233, ponchó a 291 y regaló 200 boletos, propinó 32 pelotazos y cometió 24 wild-pitch
Labels:
béisbol,
Contramaestre,
Lumumba,
pitcher,
serie nacional,
Verdecia
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Alvaro un saludo. Estoy tomando el trabajo de Luis Mariano para publicarlo. Un saludo afectuoso.
ResponderEliminarEscribeme cuando puedas. Tienes mi correo verdad?
Cuidate mucho.
Que tengas una navidad feliz y un prospero año nuevo,
Sinceramente;
Amaury