Por: Álvaro Álvarez Díaz
Compromisos laborales impostergables me impidieron cumplir con rigor la sistematicidad que exige el encuentro habitual en este blog, sin embargo estoy sorprendido por la avalancha de opiniones, críticas y alarmante preocupación de los aficionados, fieles seguidores del equipo Santiago de Cuba en la serie nacional de béisbol, después de la desastrosa actuación en predios cienfuegueros y espirituanos.
No recuerdo otro momento tan decepcionante para los miles de simpatizantes que tienen las avispas orientales, en un certamen que constituye el mayor espectáculo deportivo del país y donde Santiago ha sido por tradición, uno de sus principales animadores.
Antonio Pacheco Massó, director de las Avispas.
Seis derrotas consecutivas en la recta final del campeonato, cuando restan 12 juegos, pitcheo maltrecho desde el inicio, defensa ineficiente y ahora súmele ofensiva poco oportuna, es como para ponerle los pelos de punta al más optimista y leal a la causa santiaguera. OJO…el equipo está ubicado, ahora mismo, en el quinto lugar del oriente; FUERA DE LA ZONA DE CLASIFICACION.
Créanme, no pretendo en este instante, buscarle la quinta pata al gato, son obvias las razones que también han incidido en el inestable rendimiento de los indómitos en la lid, no obstante pude percibir en un encuentro reciente y la posibilidad que brinda la televisión, algunos rasgos de apatía entre los jugadores, cierta indiferencia en la disciplina táctica, menos incisivos en la disposición para el juego y poco agresivos en el rectángulo de bateo.
Son elementos que pueden resultar determinantes, cuando el camino es corto y se requiere de una reacción inmediata en todos los órdenes, algo poco probable después de transitar por más de ochenta juegos, donde los estelares no han tenido respiro, y los suplentes necesitan horas en el diamante para evitar el contraste, cuando le exigen responsabilidad.
El tiempo de experimentar se acabó, es preciso ganar en consistencia, no creo lógico que los bateadores mantengan e incrementen su rendimiento en las postrimerías de una larga temporada, y los lanzadores sean inefectivos, es oportuno insistir en la especialización de los pitchers, además sugiero analizar casuísticamente las verdaderas posibilidades de los serpentineros que integran el staff, hay brazos fuertes, con buena velocidad, pero falta concentración.
Digo más, sería de un inestimable valor, grabar las actuaciones de Norge Luis Vera en el box, estudiarlas, si es posible contar con su presencia a la hora del análisis, están más que demostradas las cualidades y la excelencia en el desempeño del mejor lanzador cubano, hace años. Es una verdadera clase de pitcheo que muchos pudieran aprovechar, con el objetivo de superarse, si es verdad que les interesa el arte de lanzar.
A las avispas le restan cuatro subseries, primero ante Matanzas en el “Victoria de Girón” (9-10 y 11 de febrero), Industriales en el parque Latinoamericano (12-13 y 14); para regresar al “Guillermón Moncada” y recibir a Holguín (16-17-18) y Guantánamo (19-20 y 21). Tiene dos juegos pendientes ante el equipo de Las Tunas que es casi seguro se deben efectuar.
Aunque no soy muy amigo de las cifras en los trabajos periodísticos, considero oportuno referirme a ellas por el valor de las estadísticas en un deporte como el béisbol…
El equipo Santiago de Cuba, ocupa el quinto lugar en el oriente con balance de 40 victorias y 35 derrotas, su ofensiva es de 307, ha anotado 470 carreras, 90 jonrones, el pitcheo tiene una efectividad de 5.01 carreras limpias permitidas por juego de nueve inings, los rivales le batean para 298, los relevistas son los últimos del campeonato con 6.48 limpias permitidas por juego, mientras la defensa se ubica en el onceno lugar con 972, producto de 81 errores cometidos en 75 juegos efectuados.
La señal de: ¡¡ALARMA!!, es evidente, la afición está preocupada, los síntomas de mejoría no se observan de inmediato, sin embargo existe un hálito de esperanza, las avispas nunca se dan por vencidas, luchan hasta el final, los santiagueros confían en una recuperación, la estirpe mambisa aflora en situaciones difíciles, hay que combatir y demostrarlo en el terreno.
Como me solicitaste, he entrado a tu blog. Pero voy a hacer un comentario sobre béisbol.
ResponderEliminarLeo en tu artículo que propones grabar la forma de lanzar de Vera para utilizarlo después como base material de estudio. Y esto me recuerda la cantidad de veces que hemos oido últimamente que todo el mundo le lanza bien a Cuba poque repetimos peloteros y ya nos han estudiado. Entonces me pregunto: ¿es que acaso nosotros no podemos hacer lo mismo con nuestros propios peloteros? ¿Con todo el respeto, no es posible hacer un estudio de cómo se le lanza a Peraza, para que un día nuestros pitcher dejen de darle bases por bola? ¿O es que le prohibieron a alguien ver los juegos por la TV? Después, cuando pasen los años, diremos que pasaron los años y perdimos la magia de Germán, (ahora que todo el mundo se riega por el piso para coger un roletazo), o que perdimos los juegazos de Vinent, o el bateo de Kindelán, o la técnica de Víctor Mesa. Me sumo a tu propuesta video-educativa.
Muy interesante este espacio, amigo Alvaro. es una vía ideal para conocer de las alegrías y tristezas (ante las derrotas) del deporte de nuestra tierra. Felicidades.
ResponderEliminarMe gustaría leer comentarios, entrevistas, opiniones, de algunos colaboradores (sin limitar los tuyos, por supuesto). Es interesante contar con opiniones diversas y hasta opuestas... Es la mejor manera de ver los fenómenos deportivos (culturales) desde perspectivas más globales e integracionistas.
Un abrazo desde Santo Domingo, RD.
En verdad no me gustaria ver el equipo de Santiago perder, siempre fui seguidor de el, y espero que se levante como siempre y de un final bien decoroso.
ResponderEliminarUn abrazo
Eduardo lutz