viernes, 14 de enero de 2011

Un oportuno calmante en medio de la dolencia.



Por: Álvaro Álvarez Díaz
Foto: Juan Carlos Roque Alonso

Por primera vez desde que comenzó la quincuagésima serie nacional de béisbol, mi vecino Víctor, un hombre de más de siete décadas de vida, deja entrever una leve sonrisa después de disfrutar la victoria del equipo Santiago de Cuba ante su sempiterno rival, Villa Clara, con pizarra final de seis carreras a una, después de una vigorosa reacción ofensiva en el noveno.

“Muy bien estuvo Danny Betancourt; en las nueve entradas, limitó a cinco imparables el gasto ofensivo de los anaranjados, permitió una limpia, ponchó a cinco y regaló sólo un boleto. Ahora tiene cinco victorias y un fracaso. Sin embargo me parece una aspirina para una dolencia que se torna crónica: te alivia pero, no cura”.

Así de rápido me hizo saber Víctor sus consideraciones, tras el desempeño de las avispas en el inicio de su periplo por el centro y occidente del país. Dos éxitos ante un calificado rival, sirven para incentivar la autoestima del equipo, porque a partir de hoy la exigencia será mayor. Por su turno los santiagueros se medirán al líder de la zona oriental: Ciego de Ávila y a continuación; Pinar del Río y Habana, en el inicio de los enfrentamientos Oriente-Occidente.

Hasta la fecha, el seleccionado santiaguero se ha impuesto en tres subseries particulares; vs Villa Clara (4-2); vs Holguín y Camagüey (5-1) y terminó empatado a tres victorias ante Las Tunas. Perdió cinco juegos de seis con Granma y va debajo en el balance frente a los avileños (0-3).

Por cierto, antes del traslado a tierras avileñas, les propongo un vistazo a los imprescindibles números que sirven para avivar las polémicas. La ofensiva colectiva ocupa el séptimo lugar con average de 293; han conectado cincuenta dobles, ¡¡¡dos triples!!! y 43 cuadrangulares. Anotan 199 carreras en los treinta y tres juegos celebrados pero, han dejado esperando remolque a 255 compañeros en circulación.

Aquí es preciso detenerse, porque hay detalles llamativos, primero: falta agresividad en el corrido de las bases, a veces ligan conexiones que les facilita alcanzar la almohadilla siguiente y no atacan. Segundo: subestiman la velocidad como factor de ofensiva pues han salido al robo en ¡¡¡ocho!!! ocasiones y lo increíble es que han llegado con éxito en siete. ¿Por qué no lo intentan con mayor frecuencia?.

Justo es significar en medio del desastre la eficiente defensa que, en treinta y tres juegos los santiagueros han cometido 25 errores para un promedio de 980, ubicándose en la segunda posición, superados únicamente por los avileños que acumulan 19 errores para un impresionante 985, cuando la media nacional es 972.

Finalmente; el talón de Aquiles, la gran preocupación, lo alarmante en este elenco: el pitcheo; hoy en 285 entradas lanzadas, ha permitido 318 hits, entre ellos, 60 dobles, cinco triples y 33 jonrones; la ofensiva oponente le batea para 291; le han anotado 192 carreras, entre ellas 177 limpias para una (inefectividad) de 5.59 por juego de nueve innings. Y los relevistas, hay los relevistas; en 108 entradas y dos tercios, ha permitido 89 carreras, 85 son limpias para ocupar el penúltimo lugar de la serie en el promedio con 7.04.

Hay individualidades que merecen el reconocimiento, como el desempeño del experimentado jardinero central Reutilio Hurtado que batea para 396, producto de 44 hits en 111 turnos; se incluyen ocho dobletes y doce cuadrangulares, 29 carreras anotadas y 28 impulsadas para un OPS de 1.307; por mucho el mejor del equipo indómito.

Héctor Olivera el estelar camarero, promedia para 354; 46 incogibles en 130 veces al bate; ha anotado 34 carreras e impulsado 27; acumula además diez tubeyes, un triple y siete jonrones, para un OPS de 1.035. Sin embargo uno de los puntales en el ataque oriental: Alexei Bell, tiene un raquítico 233 de promedio; 17 en 73 turnos; 5 dobles, un triple y cuatro para la calle. Ha impulsado 21 y ha anotado 18; en 21 juegos jugados.

Después de lo acontecido a mediados de semana; en la zona occidental, sigue siendo Cienfuegos el equipo con mejor balance de ganados y perdidos: 24-9; a continuación se ubican los conjuntos de Pinar del Río y Habana con 23 ganados y diez perdidos, a un juego del primero; Industriales (17-17 a siete y medio); Sancti Spiritus (16-17 a ocho); Isla de la Juventud y Matanzas (11-22 a trece); en el último puesto Metropolitanos (7-26 a diecisiete de la cima).

En la zona oriental; Ciego de Ávila exhibe veintitrés éxitos y diez fracasos para encabezar la tabla; seguido por Granma (19-14 a cuatro); Santiago de Cuba y Guantánamo (18-15 a cinco); Villa Clara (17-17 a seis y medio); Las Tunas (15-18 a ocho); Camagüey (14-19 a nueve); y cierra Holguín (9-24 a catorce del primero).

A partir de este viernes; Pinar del Río recibe en sus predios a Sancti Spiritus; Habana a Cienfuegos; Matanzas a la Isla de la Juventud y los Industriales a sus “hermanos” Metropolitanos. En el Oriente; Villa Clara espera en el parque “Sandino” por los guantanameros; Holguín por los tuneros; Granma por Camagüey y Ciego de Ávila en el “José Ramón Cepero” por las avispas santiagueras.

Me imagino que suban al montículo por Santiago de Cuba; Norge Luis Vera y Alaín Delá, dos de los mejores lanzadores, hoy.

Según lo que anuncia el calendario todos los juegos serán a la una de la tarde, excepto el de Habana-Cienfuegos que comenzará a las 8:15 de la noche con transmisión de la TV.

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