Parece lo mismo pero, no es igual.

Por: Álvaro Álvarez Díaz
Foto: Juan Carlos Roque Alonso.

Atreverse a hacer pronósticos antes de iniciar una serie nacional de béisbol en este país y no colocar al equipo Santiago de Cuba entre los favoritos, puede parecer un riesgo al que muchos no desean exponerse. Sin embargo, los aficionados de esta parte del oriente cubano, a quienes les resulta difícil admitir un señalamiento al elenco indómito, se muestran escépticos después de los primeros dieciocho juegos de la llamada serie de oro.

En las habituales tertulias del parque central de este municipio, no se hace referencia a lo que aportaron los equipos santiagueros en otros campeonatos, cuando en sus nóminas aparecían los nombres de: Manuel Benavides, Rey Isaac, Jorge García, Ariel Cutiño, Fausto Álvarez, Evenecer Godínez, Gabriel Pierre y los estelares Antonio Pacheco y Orestes Kindelán… “que va eso es historia, yo vivo el presente. Aquellos eran capaces de cambiar la pizarra en un santiamén pero, estos muchachos no tienen el mismo empuje”…así se expresó el viejo Manuel, un defensor a ultranza del béisbol santiaguero.

Aproveché, en un momento como este, para escuchar la interesante polémica, donde cada vez se incorporaban más personas, todos con la intención de opinar. Los rostros están contrariados, la gente está decepcionada y acuden a un lugar como este para desahogarse…

“No entiendo; ¿cómo es posible que el mismo grupo de lanzadores que estuvo en la serie pasada, ahora venga peor?. Ahí hay pitchers con más de tres temporadas nacionales y han involucionado. No es mi intención cuestionar a los entrenadores pero, los aficionados solicitamos una explicación que nos convenza, sí porque nosotros respiramos béisbol y nos cuesta mucho trabajo admitir humillaciones por parte de equipos inferiores en calidad”… expresó Tomás, trabajador ferroviario.

“Oigan; este pueblo ha estudiado, se ha superado y en pelota, sin chovinismo, se las sabe casi todas. ¿Por qué la dirección del equipo Santiago no aprovecha la velocidad de los corredores y las habilidades para tratar de llegar a la base inmediata?. ¿Cómo es posible que los corredores santiagueros hayan salido al robo en solo tres ocasiones? ¿Dónde está el esfuerzo, la entrega? ¿Por qué no se deslizan para evitar el doble-play?. Ese es el juego que queremos ver”… así comentó Jorge Rafael, un técnico forestal.

Razón tienen muchos, otros prefieren sufrir calladamente y esperar una reacción que por ahora no se vislumbra. Es cierto que las dos primeras subseries fueron ante equipos de mayor calidad y… ¿el resto, que han sido ante selecciones inferiores?. Hay un recurso al cual debemos acudir para ilustrar el desempeño de cualquier equipo de béisbol, una muestra inequívoca de lo que es el rendimiento: las estadísticas.

La ofensiva de las avispas, como también se conoce al equipo Santiago de Cuba, exhibe promedio de 287; han anotado 113 carreras, 49 extrabases (21 dobles, dos triples y 26 cuadrangulares. Se han ponchado en 78 ocasiones y han recibido 83 boletos, pero han dejado en circulación a 138 compañeros en dieciocho juegos celebrados.

Quizás el aspecto más estable dentro de la selección es la defensa, hoy se ubican segundos con promedio de 980; en dieciocho juegos han cometido 14 errores. A los receptores le han robado quince bases y han capturado a 12.

Ahora bien, ¿dónde está el punto neurálgico del conjunto indómito?. En el pitcheo; los números son escalofriantes; en 155 entradas de actuación han permitido 115 carreras, de ellas 106 limpias para un promedio de efectividad de 6.15 y los bateadores rivales le promedian para 300 exactamente. En el caso de los lanzadores abridores; en 92 inings le han anotado 55 carreras, 50 son limpias para un promedio de 4.89 y los relevistas, en 25 y un tercio, han permitido 60, de ellas 56 limpias para un promedio de 8.00 por juego; además la ofensiva rival promedia ante esos serpentineros para 339. Imposible tener aspiraciones.

Hoy la tabla de posiciones en la liga occidental tiene a; La Habana y Cienfuegos compartiendo el primer lugar con doce ganados y seis perdidos, los Industriales (11-8 a juego y medio); Pinar del Río (10-8 a dos); Sancti Spiritus (9-9 a tres); Matanzas (8-10 a cuatro); Isla de la Juventud (6-12 a seis); y Metropolitanos (4-14 a ocho de los primeros).

En la liga oriental; Ciego de Avila marca el paso con trece y cinco; Granma (11-7 a dos juegos); Villa Clara (11-8 a dos y medio); Guantánamo (10-8 a tres); Las Tunas (9-9 a cuatro); Santiago de Cuba (8-10 a cinco); Holguín (6-12 a siete); y Camagüey con cinco y trece a ocho de la cima.

A partir de este martes serán rivales; Matanzas y Pinar del Río en el Capitán San Luis; Industriales vs Habana en el “Nelson Fernández”; Cienfuegos vs Metropolitanos en el “Changa” Mederos; Sancti Spiritus vs Isla de la Juventud en el Cristóbal Labra; Guantánamo vs Las Tunas en el Julio Antonio Mella; Villa Clara visita a Holguín en el “Calixto García”; Ciego de Ávila a Granma en el “Mártires de Barbados”; mientras Santiago de Cuba estará en el “Cándido González” para medirse a los camagüeyanos; todos los encuentros desde la 1:00 de la tarde, excepto el de Villa Clara-Holguín que será transmitido por TV a partir de las 8:15 de la noche.